En Perú, las plantaciones de arándanos pasaron de 400 a 19,500 hectáreas en una década, impulsando la innovación tecnológica en el sector.
Con la población mundial proyectada a superar los 10,000 millones de personas hacia 2050, garantizar la seguridad alimentaria se ha convertido en un desafío sin precedentes. Un reciente informe del Observatorio de Patentes y Tecnología de la Oficina Europea de Patentes (OEP) revela cómo las tecnologías digitales están contribuyendo a afrontarlo de manera sostenible: las solicitudes de patentes en este campo crecen un 9,4% anual, triplicando la media de todas las demás tecnologías.
«La agricultura digital está avanzando a un ritmo sin precedentes, transformando la forma en que producimos alimentos», señaló António Campinos, presidente de la OEP. «Si alineamos investigación y tecnología con las necesidades reales, reforzamos la cooperación global y garantizamos un sistema de patentes sólido y accesible, podremos construir sistemas alimentarios resilientes y equitativos».
Perú: tradición agrícola y liderazgo innovador
Gracias a su diversidad climática, el Perú se perfila como un laboratorio natural para el desarrollo de tecnologías agrícolas digitales. Desde la costa árida hasta los Andes y la Amazonía, el país combina una tradición agrícola milenaria con modernas capacidades de innovación, lo que le otorga un lugar estratégico en la transición hacia una agricultura digital sostenible. Además, su ubicación favorece la exportación a mercados de Asia y Norteamérica, apoyada en cultivos emblemáticos como la quinua, el café, el cacao y los productos agroexportadores.
Arándanos: motor de innovación tecnológica
El caso del arándano peruano ilustra esta transformación. En apenas diez años, las áreas de cultivo crecieron de 400 hectáreas en 2013 a 19,500 en 2023, consolidando a esta fruta como uno de los principales productos de exportación del país.
El impulso a la innovación ha sido clave. Con el apoyo de Indecopi, la Universidad Privada Antenor Orrego (UPAO), CONCYTEC y empresas como Danper, se desarrollan proyectos pioneros que combinan automatización, visión artificial y redes neuronales. Entre ellos destaca un vehículo no tripulado con navegación autónoma y brazo robótico capaz de detectar, contar y evaluar la madurez de los arándanos, resolviendo la escasez de mano de obra y aumentando la eficiencia de recolección.
El impacto también se refleja en el ámbito de la propiedad intelectual: entre 2011 y 2024 se presentaron 140 solicitudes de nuevas variedades de arándanos ante el Indecopi, consolidando al país como un referente regional en innovación agrícola.
«El análisis de patentes demuestra el papel clave de la innovación digital en la agricultura latinoamericana, con el Perú a la vanguardia gracias a los avances en el sector de los arándanos», afirmó Alberto Villanueva Eslava, presidente ejecutivo del Indecopi. «Agradecemos a la OEP por incluirnos en este estudio, que subraya la relevancia de tecnologías como la inteligencia artificial e internet en la lucha contra el hambre global».
Panorama regional y global
En América Latina, las solicitudes de patentes de agricultura digital crecieron un 11% anual entre 2000 y 2022, superando con creces el promedio mundial.
Las proyecciones indican que hacia 2050, la región podría abastecer dos a tres de cada cinco frutas y verduras en el mercado global.
A nivel mundial, las tecnologías agrícolas digitales muestran un crecimiento sostenido del 9,4% anual, frente a la creciente necesidad de alimentar a una población en expansión.